Una niña no puede elegir ser madre. De 2020 a 2022 se registraron más de 176, 914 niñas entre 10 y 19 años embarazadas, muchas de ellas abusadas en sus propias casas.
La necesidad de nombrar esto nos trae a las múltiples voces que claman la legislación sobre el cuerpo de una mujer, pero no hay leyes severas que defiendan las violaciones y violencias que el cuerpo de una mujer es sometido desde temprana edad.
La responsabilidad es intergeneracional, reconocer violencias que nuestras ancestras fueron sometidas es una ola del mismo mar. La artista trabaja con múltiples generaciones de madres, trayendo el arrullo como un audible clamor al llamado de la memoria, aquellas que nos recuerdan un lazo entre nuestras madres, en este caso se presentan como una denuncia de las niñas que fueron obligadas a tomar la maternidad como una opción.
Maya Juracán